• El consumidor no puede esperar la misma presentación, textura, color y olor en cosméticos naturales que en la cosmética convencional. No podemos exigir pan integral de color blanco, nos estamos engañando.
  • No podemos exigir cosméticos naturales si no estamos dispuestos a asumir los cambios que se producen en materias primas que la componen que siempre están variando en composición, textura, color, etc.
  • No podemos exigir la misma vida a un producto conservado con química dura que a un cosmético conservado con sustancias mucho más suaves y naturales.